¿Quién nos ha robado el mes de abril?

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Ni Martin Scorsese, Premio Príncipe de Asturias de las Artes, hubiera diseccionado la actualidad con un guion más furibundo




Hay países en cuya jeta nunca se pone el sol. Latitudes donde el morro y la criadilla son un manjar. Tierras de calma chicha, sumergidas en una rutina amniótica capaz de tipificar cualquier extravagancia. Observen: Campaña electoral. Partido Popular en ruta. Parada obligada en la fábrica de embutidos de turno. Mariano Rajoy toma una bandeja de chorizos. Su asesor de imagen se apresura y le advierte de que no es el mejor momento para posar de esa guisa en público, los casos de corrupción comenzaban a cobrar revuelo mediático. La anécdota la explica la periodista de La Sexta, Cristina Pardo, y forma parte de las "autoentrevistas" que Jorge Todolí ha realizado a decenas de famosos a lomos de los "23 caballitos" de su Seat 600, ahora recopiladas en el libro Confesiones en un 600, adaptación que Todolí tomó prestada de un formato de éxito en Alemania, donde el periodista recaló forzosamente en busca de trabajo (1).

 La obra se presenta a la par que la ciencia se marca un bukowski y nos desvela los entresijos de la música de cañerías que redobla en cada hogar durante la madrugada. La inquietante banda sonora lleva por título "pulso de Zhukowski" y es un fenómeno emparentado con la circulación sanguínea, que responde a los principios elásticos del agua (2).
Hay países en cuya jeta nunca se pone el sol. Latitudes donde el morro y la criadilla son un manjar
En estos abriles, encapotados, la normalidad lo encharca todo. Lo mismo da que hablemos de un rey con genética campechana que acude a una comida normal de ex alumnos de un colegio normal, en un restaurante normal (3); que de una ministra, con porte inmaculado y entrañas hardcore, capaz, siempre con el debido "presuntamente" delante, de saltarse semáforos, agenciarse unas cremas vallecanas o lucir postgrado fantasma en la Rey Juan Carlos (4). Como era de prever, el cifuentazo finaliza tarde y mal, recubierto de un coloquio de trincheras con ética de parvulario. De un lado, la intimidad y sus aledaños. Del otro, el linchamiento sin trabas, con trapicheo de vídeos enriquecidos con antologías de célebres cleptómanos. Justo en el  intermedio, la inmundicia, la mirada turbia de las cloacas, la extorsión más torticera (5), en el mismo día en que los Premios Princesa de Asturias, con agudeza azconiana, encumbran a Scorsese, "monaguillo de día, cocainómano de noche", en definición de Rodrigo Cortés (6). "El populismo de los ultrapuros ha convertido la política en una cacería miserable y repugnante. Sólo importa el daño que podemos hacer y el que nos hacen. Sólo importa la carnaza y excitar la más bajas pasiones de la turba amotinada", escribe Salvador Sostres en su columna Hay un vídeo de todos nosotros (7). La exhortación, con pinta bienintencionada, esconde sus trampas. Con esos mimbres estamos a un paso del hashtag "Cifuentes somos todos", ya lo vivimos hace poco más de un año con Messi y Hacienda, momento culmen en el que la comprensión degrada en tragaderas; y no, ni todos tenemos la zurda del crack argentino, ni el cinismo de la ex ministra.

Durante su última lección en la Universidad Carlos III, el teólogo Juan José Tamayo reclamó la utopía, sin renunciar a la religión, cuyo valor principal es producir herejes (8), tan necesarios en estos días, ante el avance sin paliativos del pesimismo. Se trata de extirpar, de una vez por todas, imágenes como la de Magnus Wennman, una de las mejores del World Press Photo de este año, que retrata a dos hermanas adolescentes, en estado catatónico, alimentadas por sonda en un centro de refugiados de Suecia. Padecen una extraña apatía, conocida como Síndrome de Resignación, que afecta, en aquel país, a cientos de niños deportados (9).  

 En las antípodas informativas, un anuncio como una pulla, la apertura, en 2022, de un hotel espacial con vistas a una humanidad microscópica. Se llamará Aurora, orbitará a 320 kilómetros de la Tierra y pasar una docena de noches a bordo costará alrededor de los ocho millones de euros. Ya tiene 22 reservas (10). Puede que sean de tertulianos en busca, por fin, de un debate de altura. 


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