Volver a empezar

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Tal día como hoy, Yuri Gagarin se convirtió en el primer hombre de la historia en salir al espacio


Estaba el Madrid solidario, campeando su empatía, reconciliador, dispuesto a olvidar rencillas clásicas. Culés y merengues se daban la mano en la desdicha europea cuando un árbitro, incapaz de entender la magnitud del pacto, vio penalti donde medio mundo intuyó piscinazo con tirabuzón, y se sacó de la chistera una pena máxima en el 94 para mandar al garete cualquier intentona de tregua. El colegiado inglés, Michael Oliver, se había equivocado de canal. Los magos y los cómicos desfilaban por Tele5, en la final de Got Talent, sometida a un lavado de cara en toda regla después del troleo televisivo más grande de la historia, tras el de Rodolfo Chikilicuatre, aquel Tekilazo de ahora hace un año, con sainete final de Risto. Anoche la gala, con alma de Michael Landon, transcurría por otros derroteros, entronando a la postre a un poeta en ciernes que, de momento, sólo tiene licencia de trovador. Por suerte, la2 defendió la irreverencia de la velada, con la emisión de Tamaño natural, una historia sórdida con muñeca sexual de por medio, radiografía salvaje de una sociedad represiva, asfixiada en rituales, cabal hasta la podredumbre. El tándem Berlanga-Azcona repetía escándalo con música de Maurice Jarre (padre de Jean-Michel) en 1973, el mismo año que Pedro Olea presentaba No es bueno que el hombre esté tan solo, otra crítica contundente contra la deshumanización postindustrial, con maniquí femenino en el reparto y guión firmado por José Luis Garci. 

Antes que Penélope proclamase a Pedro desde la tarima de los Oscar en modo Heidi, Garci abrió la veda un 11 de abril de 1983 (1), siendo el pionero (con permiso de Buñuel y su Discreto encanto de la burguesía) en llevarse la estatuilla a Mejor Película Extranjera por su Volver a empezar (Beguin the beguine, en referencia al baile con ritmo de rumba lenta, popularizado en los años treinta por Cole Porter), un "love story crepuscular" con Gijón por montera, protagonizado por un Antonio Ferrandis que dejaba su anterior vida de pescador en Nerja para ponerse en la piel, entre notas del Canon en Re Mayor de Pachelbel, de un profesor de Literatura Medieval en Berkeley, ex futbolista del Sporting, que vuelve fugazmente a su ciudad natal tras recibir el Nobel. Era la particular oda de Garci a "una generación interrumpida, la más vital y sufrida que ha tenido la España contemporánea; la de aquellos que fueron jóvenes en los años treinta y que aún están aquí, llenos de amor y de esperanza, de coraje, de ternura y de fe en la vida"; la tentativa cinematográfica de "recuperar el encanto en una época de desencanto". "Sólo se envejece cuando no se ama", pronuncia en algún momento del metraje su protagonista, quizá preludio de una conversación y una frase, la mantenida por el propio Garci años más tarde con el ex futbolista del Real Gijón, José Manuel Fernández, en el Hotel La Reconquista de Oviedo, momentos antes de la entrega del Premio Príncipe de Asturias de las Artes a Luis García Berlanga, a la postre leitmotiv y reválida de su Asignatura pendiente: "Siempre han sobrado dos días en mi vida, dos días completamente inútiles, ayer y mañana". 
Se cumplen 35 años del primer Oscar español a la mejor película de habla no inglesa, fue para 'Volver a empezar', de José Luis Garci
En el porvenir tienen puestas sus garras las últimas tecnologías. En un fotograma de Her, una rapaz gigantesca, que emerge de una megapantalla publicitaria, se abalanza sobre un Joaquin Phoenix que empequeñecido como un roedor ignora lo que ocurre a su espalda. Las redes sociales ya ofrecen un servicio postmortem en el que un 'heredero' virtual gestiona los perfiles del fallecido. La web eterni.me va un poco más allá y propone que un avatar robótico siga publicando en la nube con el nombre y el estilo reconocible del desaparecido (2).
Las nuevas tecnologías ya ofrecen herederos virtuales para gestionar los perfiles de los fallecidos
Lejos quedan las hazañas palpables, la edad de las proezas. Ahora, precisamente, se anuncia una expedición a la Antártida en busca del Endurance, el barco con el que el irlandés Ernest Shakleton (3) intentó llegar al continente austral para recorrerlo a pie. En su día Shakleton fue compañero de aventuras de Falcon Scott, santo y patrón de los exploradores trágicos, reconocido en España gracias a Mecano y sus Héroes de la Antártida. Scott, junto a Wilson, Bowers, Oates y Evans, protagonizó una odisea que pretendía la gloria de pisar por primera vez el suelo del Polo Sur, con un reclamo que se publicaba así en los periódicos de 1907: «Se buscan hombres para viaje peligroso. Sueldo escaso. Frío extremo. Largos meses de completa oscuridad. Peligro constante. No se asegura el regreso. Honor y reconocimiento en caso de éxito». Respondieron más de 5.000 aspirantes. Aunque alcanzaron su objetivo, llegaron con un mes de retraso, la caravana noruega de Roald Amuldsen se les había adelantado. El resto es un réquiem. El grupo español formado por los hermanos Cano y Ana Torroja se inspiró en uno de los relatos que Stefane Zweig, escritor que junto a Walter Benjamin expió los pecados del XX, recopiló en Momentos estelares de la Humanidad. La canción formaba parte del álbum Descanso Dominical, que también incluía La fuerza del destino, cuyo videoclip unió a Nacho Cano y Penélope Cruz; y Laika, en homenaje a la perra soviética que se convirtió en la precursora de los astronautas a lomos del Sputnik, cuando el maltrato animal era mera superchería. En una metáfora frenética, en lo que sonaban cinco temas de un disco, sin tiempo apenas para ir al lavabo, la carrera de las conquistas se precipitaba de la corteza terrestre al espacio sideral. Tal día como hoy, hace justo 57 años, Yuri Gagarin tomaba el testigo de Laika y se convertía en el primer ser humano que orbitaba alrededor de la Tierra (tardó una hora y 48 minutos en darle la vuelta (4)). Durante el vuelo, contactó con la base para explicar: "La Tierra es azul, es maravillosa... Pobladores del mundo, salvaguardemos esta belleza".
(Nota irrelevante. Este artículo no ha sido patrocinado ni por Red Bull ni por Aquarius). 



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