Hasta ahora sabíamos de las ventajas del whatsapp para dejar a la pareja sin necesidad de pasar por un reality de Telecinco. También para montar una primavera árabe o cortar la diagonal a la hora del Ángelus; pero ahora, una contrata de una subcontrata inventa otro vacile: el recorte de la jornada laboral por sms
"La diferencia entre los esclavos en la época de Roma y los empleados de hoy es que los esclavos no tenían que adular al jefe"
Nassim Nicholas Taleb. El lecho de Procusto
Hasta ahora sabíamos de las ventajas del whatsapp para dejar a la pareja sin necesidad de pasar por un reality de Telecinco. También para montar una primavera árabe o cortar la diagonal a la hora del Ángelus; pero ahora, una contrata de una subcontrata inventa otro vacile: el recorte de la jornada laboral por sms. La enésima empresa encargada de la limpieza de las oficinas de Liberbank avisó a sus empleadas, vía móvil, que reducía a la mitad el horario de sus contratos (1). Por si fuera poco pitorreo, algunas jornadas pasan a ser de un máximo de diez minutos. Cualquier mujer de la limpieza con varios trienios de mocho en las cervicales sabe bien que diez minutos dan para pulir cuatro sucursales del banco Hispano Americano, fumarse un piti, rajar con las compañeras del Barçagate o del Tribunal de Estrasburgo, preparar un sofrito y, si hace sol, tender una colada de ropa blanca. Con semejante crono, no descarten el doping de las kellys con clembuterol, ni tampoco que cuando usted y yo lleguemos a la jubilación, allá por los 79 años, mes arriba, mes abajo, nos denieguen la pensión por una cuestión de centésimas de segundo en el tiempo cotizado.
En La Contra de La Vanguardia, el psicólogo Peter Vorderer sentencia: "El móvil ya nos ha dividido en amos y esclavos"(2). Todo eso ocurre en el 2020 de la era cristiana, "tres años después de que se admitiera a trámite la denuncia presentada por la Asociación Española de Abogados Cristianos –sin pecado colegiados–", contra Willy Toledo por cagarse fuera del pipican. "Bienaventurados los que denuncian gilipolleces y saben esperar con paciencia porque suyo será el reino de los juzgados colapsados", escribe Gerardo Tecé (3).
Demolition Man, peliculón de Stallone, ya predijo un futuro sin blasfemos. Y que Schwarzenegger llegaría a político. Así está la distopía. Javier Rodríguez Marcos lo resume con una frase del último ganador de Supervivientes, Omar Montes: "Tengo la inteligencia justa para pasar el día"(4). Paul Kurgman, Nobel de Economía, apuntilla: "Hoy triunfan los peores"(5).
O como remarca Víctor Lapuente en El País: "Algunas voces provocadoras, como la del historiador Niall Fergurson, llevan tiempo advirtiendo sobre la gran degeneración en la que vivimos, con políticos corruptos y ciudadanos inanes (...) En un libro de próxima publicación, La sociedad decadente, el periodista Ross Douthat ofrece un arsenal de datos sobre el estancamiento de nuestras sociedades. Formamos menos empresas, cambiamos menos de ciudad y tenemos menos hijos. El arte, la cultura y la política se han vuelto repetitivos. Disfrutamos de un alto nivel de vida material, pero intelectualmente estamos exhaustos. Es la definición canónica de decadencia. Envejecemos entregados a los placeres del cuerpo, y adictos como nunca a los calmantes de la mente"(6). Todo sea porque la tasa Google nos financie la paga de los domingos (7). Amén.
(1) https://cadenaser.com/emisora/2020/02/13/ser_toledo/1581615186_082490.html
(2) https://www.lavanguardia.com/lacontra/20200217/473622505752/el-movil-ya-nos-ha-dividido-en-amos-y-esclavos-digitales.html
(3) https://ctxt.es/es/20200203/Firmas/31034/gerardo-tece-tecetipos-Willy-Toledo-honor-ofensa-Abogados-Cristianos.htm
(4) https://elpais.com/cultura/2020/02/18/actualidad/1582052149_515797.html
(5) https://www.lavanguardia.com/cultura/20200219/473655934304/paul-krugman-premio-nobel-entrevista-triunfan-los-peores.html
(6) https://elpais.com/elpais/2020/02/16/opinion/1581873968_438593.html
(7) https://www.publico.es/economia/tasas-google-tobin-gobierno-lanza-millonario-impuesto-gigantes-digitales-no-les-cobrara.html
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