Como todo froilán sabe, el dinero está para malgastarlo. Es de primero del curso a distancia de futuros eméritos. Lo contrario sería como tener abdominales y no quitarse la camiseta. Un sindiós
Los reyes se han echado al asfalto. En este julio, sin canción del verano, es lo más parecido que van a encontrar ustedes a la gira aplazada de Extremoduro. Como los Griswold pero en versión ibérico-campechana, o sea con el típico Mercedes-Benz Clase S, valorado en más de 500.000 euros, que gasta todo borbón medio. Se trata de demostrar, en plan Fraga, que bañarse en Palomares o recoger nectarinas en Lleida no entraña ningún peligro y, de paso, blanquear la imagen de la Casa Real, marcándose un callejeros monárquicos. Así se plantaron en Sevilla para visitar las Tres Mil Viviendas, recuerden, el barrio más pobre de España. El vehículo en cuestión, según consta en el portal de la transparencia, fue adquirido en 2019, por lo que encima queda fuera del Plan Renove. Desde entonces, y a raíz de todo este lío del confinamiento, suponemos que Don Felipe, como el resto españoles con utilitario, lo ha ido arrancando una o dos veces por semana para no quedarse sin batería.
El artículo 56 de la Constitución lo deja claro: el rey no está sujeto a responsabilidad, lo que le ha valido a la corona, por lo menos desde la última edad de hielo, para vivir en una especie de Toys R Us de caprichos millonarios. Como todo froilán sabe, el dinero está para malgastarlo. Es de primero del curso a distancia de futuros eméritos. Lo contrario sería como tener abdominales y no quitarse la camiseta. Un sindiós. Ya habrán notado, además, que un sector de la prensa quiere quitarle hierro al asunto convirtiendo el supuesto desfalco de Juan Carlos en una historia romántica. Somos así de tiernos...
En La Contra de La Vanguardia, Cristina Martín, presidenta de la Asociación Española del Lujo, asegura que los niños españoles son los primeros en perfumarse. Dice que la tradición de la canastilla está muy arraigada aquí, como todo el sector de la belleza, que es otra forma de llegar muy lejos en el Tinder de la farándula. Pues eso, fabricando pícaros, desde la cuna, a base de Nenuco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario